Etiquetas

IMG_4248

Tomó la hoja de un árbol y la miró. En ella estaba la esencia del árbol; en ella estaba la esencia del universo.

hayas y abetosCada vez que veo algo hermoso, no solamente árboles, las palabras que en silencio suelen brotar dentro de mí – ¡qué belleza!- están llenas de gratitud porque eso esté ahí, y yo esté aquí para apreciarlo.

IMG_4263Las personas árbol están abiertas al misterio.

hayas (2)El preservar las arboledas casi milenarias es algo que tiene un valor sagrado, y que una vez destruido habrá desaparecido para siempre. La cualidad de «lo sagrado» no la reconoce la mente racional, sino otras formas de conocimiento. Saber que «esto es terreno sagrado» o sentir «la presencia del espíritu» y confiar en esa profunda percepción que uno tiene de ello, puede que sea una diferencia fundamental entre las personas árbol y las personas no árbol.

hayaCuando amas un haya, por ejemplo, amas a todas las hayas, estás conectada con el género entero de las hayas, y automáticamente vinculada con el alma de esa especie.

en el corazón del hayaSé que en vidas anteriores fuimos árboles, e incluso en esta vida seguimos siendo árboles. Sin árboles no puede haber personas. Somos árboles y aire, arbustos y nubes.

robles y helechosMe quedé paralizado escuchando y supe lo que nunca se podrá expresar: que lo natural es sobrenatural, y que yo soy el ojo que oye y el oído que ve. Y que lo que está fuera ocurre dentro de mí, que fuera y dentro no están separados.

Nota:Todos los textos proceden del libro «Sabia como un árbol» de Jean Shinoda Bolen